Promover el deporte en la oficina te ahorrará una fortuna

Desde siempre los espacios de trabajo se han enfocado estrictamente en la productividad: cubículos más pequeños, computadoras más rápidas y cero distracciones para los trabajadores. Sin embargo, una nueva corriente empresarial está buscando cambiar esta situación. Muchas empresas modernas han descubierto los aspectos positivos de tener una fuerza de trabajo perseverante, motivada y con deseos de superarse siempre. ¿Cómo se fomentan estos valores? Gracias al deporte. 

Carlos Palos es el Director de Marketing de Zurich, una de las aseguradoras españolas más importantes. Él nos indica que promover un modelo de empresa saludable que se preocupe por el bienestar de los empleados puede significar un alza en la productividad de la empresa. “Llevamos cinco años impulsando el running entre nuestros trabajadores” comenta el especialista y señala que estas actividades siempre se deben enlazar con los valores de la organización y el trabajo en equipo. Un estudio de la Universidad de Harvard señala que por cada dólar invertido en fomentar el deporte en los trabajadores se ahorran 4 dólares en costes médicos y 3 en absentismo laboral. Es decir, mantener a los colaboradores sanos es un ahorro significativo a corto y largo plazo para la empresa. 

Invierte hoy para ahorrar mañana

¿Tienes tu propia empresa? No creas que esto que te propongo tiene mucho que ver con ser un buen samaritano. Son simples matemáticas. Un empleado que hace deporte se enferma menos, tiene una actitud más positiva, casi no falta al trabajo y es más eficiente en sus tareas. Las empresas grandes ya saben el ahorro significativo que esto representa para sus presupuestos. Tomemos su ejemplo.

Un reto logístico

Muchas empresas peruanas sienten que están a décadas de ser modernas y poder implementar programas deportivos ya que los consideran un lujo. Sin embargo, no es tan difícil como parece. Organiza jornadas, días de campo o ginkanas. Pasa una encuesta entre tus colaboradores para que entre todos se decida qué actividades se harán. De esta manera no sentirán que se les está obligando a asistir un sábado a una actividad de la compañía.

Deporte dentro de la oficina

Por lo general las oficinas no cuentan con duchas o vestuarios para los trabajadores. ¿Por qué los tendrían? Lo que pasa es que muchos edificios fueron diseñados para ser prácticos pero no amigables. Firma acuerdos con gimnasios cercanos para que tus trabajadores puedan tener descuentos. A la larga intenta implementar zonas donde puedan estirar los músculos.

Sin roches

¿Coincidir con el jefe en el gimnasio? ¿Llegar sudado y tener que bañarte ahí mismo? Son preguntas válidas que podrían hacerte pensar dos veces antes de juntar negocios con placer. Pascual Girons, coach empresarial, nos indica: “En pantalón corto todos somos iguales, desaparece el rango, salimos de nuestra zona de confort y de los roles que inconscientemente adoptamos en el desempeño de nuestras tareas”.

Fuente: El País